DESCRIPCIÓN DEL PRODUCTO: El tomate San Marzano lleva cultivándose en distintas áreas italianas desde el año 1770, cuando sus semillas fueron un regalo del virreinato de Perú (origen de muchas Solanáceas) al Reino de Nápoles.
Esta variedad de tomate tiene un tamaño mediano, aunque lo que realmente lo caracteriza es su forma alargada, en forma de pera estirada, parecida a la de un pimiento, y que nada tiene que ver con el concepto que tenemos de tomate redondo. Es bastante productiva y puede producir hasta 10 frutos por ramo, que en un ciclo largo, son muchísimos kilogramos de producción por metro de superficie.

A nivel organoléptico, el tomate San Marzano ofrece una relación perfecta entre el contenido en glucosa y ácido, por lo que tiene muy buenas capacidades para conserva y ser enlatado. Su uso principal es como complemento de pasta y pizzas, siendo el más utilizado, esta y sus variedades semejantes para este tipo de recetas.

Se puede cultivar a nivel de huerto, teniendo en cuenta que es una planta de crecimiento vertical y necesita tutores y cuerdas para mantenerla erecta.

Como decíamos, es una variedad que se usa mucho en salsas de tomate muy apreciados en la cocina italiana, sobre todo en el empleo de la preparación de pizzas. Su carne para la elaboración de salsas parece ser menos ácida es por esto que es ideal para pizzas.